lunes, 18 de agosto de 2014

Día pulserita

Después del madrugón y palicilla de la excursión a Chichén Itzá apetecía un poco de descanso. Betty sí que tenía que madrugar porque perdió al juego de Star Wars, por lo que a las 7:40 ya tenemos reserva para cenar esta noche en el retaurante Mexicano, que está en el beach club, en la playa.


La mañana la pasamos en la pisci del hotel, lo que se traduce en que hemos sufrido la masificación extrema de estas instalaciones. Constantemente están organizando actividades para todo aquel interesado. Jomer casi gana la de tiro con carabina, lo cual hubiera molado bastante porque los ganadores suben por la noche, durante el espectáculo al escenario, y hacerle la foto ahí arriba no tendría precio.

Actualizando el blog en la pisci
Un coatí nos ha robado unos sandwiches que teníamos en la mochila de Chus sin, misteriosamente, romper la mochila...


Coatí ladrón
Por la tarde visitamos la playa y la piscina del Yucatán (estando en el Tequila podemos utilizar las instalaciones de Yucatán y el Playacar) y hacemos tiempo para la cena Mexicana.

Haciendo el mono en la playa
Mil intentos para pillarnos a todos en el aire...
En el restaurante los entrantes y potres son de buffet y el principal, de carta, pedimos de todo para catarlo bien. Al hotel dando un paseito. El día costra ha terminado.

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